Quiero aprovechar la oportunidad que me brinda estar al frente del Consistorio soriano para transmitir mi mayor afecto y mejores deseos para estas fiestas y para el Año Nuevo 2008, año que espero esté colmado de paz, de alegría y de bienestar, para todos y cada uno de los sorianos y sorianas.
En estos días hacemos balance de lo transcurrido durante los pasados doce meses, y quienes tenemos la responsabilidad del trabajo por los ciudadanos, podemos ver con cierta perspectiva el desarrollo de este trabajo. Sin duda hay mucho por hacer, y nuestro empeño por conseguir una Soria mejor, moderna, plural, y con futuro para todos y todas, es un excelente motor que impulsará nuestros ánimos durante el año que comenzaremos en unos días.
Es una labor de consenso y cooperación, de diálogo, entendimiento y encuentro que debe asumir cada soriano en particular, y que las instituciones públicas deben abanderar en una labor de cohesión. El empleo, la vivienda, la cultura, la atención a nuestros mayores y a nuestros jóvenes son nuestros objetivos, sin olvidar los problemas cotidianos, los que afectan a la vida diaria de los ciudadanos y de sus familias. Sirvan estas líneas para sellar la renovación de nuestra voluntad de trabajo y nuestros objetivos para el año que viene.
No quiero que quede desapercibida la labor de todos aquellos que durante estos días de encuentro y convivencia familiar, trabajan para que cada uno de nosotros disfrutemos en compañía de nuestros seres queridos. El trabajo de estos profesionales de los sectores más diversos, es imprescindible en estos días, y su esfuerzo debe ser reconocido.
Felices Fiestas para todos y todas, disfrútenlas en armonía en compañía de los suyos, y que los sentimientos que empapan estos días se prolonguen durante todo el año.
